Viajar con un adolescente, o varios, parece una auténtica locura. La adolescencia, de forma general, es una de las etapas en las que nuestros hijos más desorientados se sienten y eso hace que se muestren rebeldes y difíciles. Con ello llegan los conflictos por una falta de entendimiento entre padres e hijos.
El mejor consejo que podemos tomar para planificar un viaje con ellos es «Ponerse en su piel». Partiendo de esta frase, te vamos a dar unos consejos para que viajar con adolescentes no sea una locura.
Escúchalos
Un gran error que cometemos los adultos es creer que los conocemos, pero, aunque sea cierto, tenemos que darnos cuenta de que están cambiando, de que ya no son esos retoños que nos llevábamos a la playa o a la montaña porque les encantaba, ahora tal vez prefieran lo contrario. Pudieron cambiar de gustos ayer mismo. Antes de elegir un viaje por completo, pregúntales si les apetece una cosa u otra.
Dales responsabilidad
Nuestros hijos adolescentes son niños para muchas cosas, pero casi adultos para otras y les gusta ser tratados como tal. Pues los adultos tenemos responsabilidades, así que ellos también pueden tenerlas. Evidentemente, necesita unas pautas para saber por donde empezar; y un apoyo para sentirse seguros, pero puedes cederles el trabajo de llamar a un lugar para averiguar un horario, que lleven ellos las riendas del Google Maps para saber como llegar o averiguar la reputación del alojamiento en el que vais a dormir.
Ten un plan B
Como sus gustos son tan cambiantes y te sorprende cada dos por tres, y lo que parecía que les va a gustar, pues ya no lo hace tanto. Por eso, es recomendable que tengas un plan B, para poder sustituir uno o varios de los planes por otros que les encajen más. No te cierres a una única posibilidad y dales diferentes opciones, para que se sientan parte importante del viaje.
Entiende su necesidad de estar conectados
En la etapa de la adolescencia, que los amigos son los más top, no puedes pretender tenerlos aislados de la tecnología durante todo el viaje. Necesitan estar conectados a sus amigos, poder contar su viaje en RRSS y ponernos verdes (que lo van a hacer)
Tampoco es necesario que estén las 24h con el móvil, pero durante el viaje, es necesario que les dejes sus tiempos para que puedan hacerlo, incluso se puede pactar algo tipo… «puedes hacer fotos mientras estemos en la visita, pero no puedes conectarte a Instagram hasta la noche». Los límites los marcas tú, pero si no quieres viajar con adolescentes cabreados las 24 horas, lo mejor es que les des ese tiempo.
Dales la oportunidad de conocer algo increíble
Cuando nuestros peques son chiquitines somos una gran fuente de sabiduría, lo que nosotros decimos es «palabra de Dios», jejeje; pero cuando se convierten en adolescentes, dejamos de ser su Wikipedia y sus amigos e Internet son su fuente de conocimiento. Por eso, si en un viaje con ellos les enseñas lugares, sensaciones o experiencias que jamás podrían imaginar, les estás diciendo que pueden confiar en ti como proveedor de sabiduría, líder a quien seguir y no un boomer a pesar de tu edad.
Las vacaciones tienen que molar
Lo siento, pero ya no vale estar tumbado en la playa, ahora hay que ir al acantilado para hacerse un selfie. Es una generación que necesita presumir y se presume con fotos, ya no vale lo que hacíamos antes. Dales la opción de que puedan hacerlo, déjales que sean los protagonistas de esas imágenes que tanto necesitan compartir. Llévalos a parajes que les gusten y déjales que se hagan fotos, incluso solos. Además, esto también es una forma de expresión y creatividad que te dará pistas sobre lo que le gusta y lo que no, aunque cambie rápido.
Incluye actividades físicas
Te has dado cuenta de lo cansados que están siempre??? Según dicen los expertos, es por todos los cambios que están sufriendo. Eso no es excusa para quedarse todo el día en la cama, al contrario, es necesario que se muevan y hagan actividades. Busca actividades que les gusten, que les aporten diversión y a la vez hagan ejercicio.
Tienes adolescentes en casa??? Cuéntame en comentarios como viajas con ellos.